Estos son los cambios del cuerpo en primavera

Ya queda menos para dejar atrás el invierno, los días van creciendo y empiezan los cambios en el cuerpo para primavera. Algunas personas experimentan cansancio, otras incluso experimentan distinto estado de ánimo.

Nos despedimos de los efectos del invierno y nos preparamos para la llegada de la primavera.

Empezamos por la astenia primaveral

Este trastorno temporal es muy común en la mayoría de las personas, seguro que alguna vez lo has experimentado. Cursa con fatiga, somnolencia, falta de concentración e incluso cambios en el estado de ánimo.

La astenia es la respuesta del cuerpo a la adaptación a las nuevas condiciones ambientales, como el aumento de la temperatura y de las horas de luz. Para prevenirla puedes tomar alguna de estas medidas:

Mantener una rutina de descanso estable para ayudar a tu reloj biológico a adaptarse.
Basar tu dieta en ricos en vitaminas del grupo B, magnesio y triptófano, pues mejoran la energía y el estado de ánimo.
¿Sabías que la exposición a la luz natural favorece la producción de serotonina y regula los ritmos circadianos?
La actividad física moderada ayuda a reducir la fatiga y mejora el estado de ánimo. Es momento de ponerse el chándal.

Esto es lo que ocurre en tu sistema inmunológico

Con la llegada de la primavera se producen cambios a nivel biológico en tu cuerpo:

Disminuye la melatonina y aumenta el cortisol. Durante el invierno, los niveles de melatonina son más altos por la menor exposición a la luz solar. Con la primavera, la melatonina disminuye y el cortisol, la hormona del estrés, aumenta, lo que puede debilitar el sistema inmunológico. Esto no es malo, pues ambas hormonas son necesarias, pero siempre en niveles adecuados.
La alimentación y la exposición a diferentes patógenos varían con las estaciones. Esto influye en la composición de la microbiota intestinal, que es clave en la respuesta inmune.
Cuando la floración, el polen y los alérgenos aumentan en el aire, las personas alérgicas pueden experimentar respuestas inflamatorias exageradas.

Prepárate para las alergias

Si tus síntomas te impiden llevar el ritmo normal de tu vida, acude al alergólogo. Mientras puedes tomar estas pequeñas acciones para disminuirlos:

Evita salir a la calle en horas de alta concentración de polen.
Ventila tu hogar, preferiblemente al mediodía, cuando hay menos polen en el aire.
Usa gafas de sol y mascarilla si se trata de un día de alta polinización.

Fortalece tus defensas para prepararte ante los cambios del cuerpo en primavera

Incorpora a tu dieta frutas y verduras ricas en antioxidantes y vitamina C.
Asegúrate de disponer de un descanso adecuado. Es fundamental para que el cuerpo pueda recuperarse y defenderse.
Bebe suficiente agua. Es importante para muchas funciones del cuerpo y clave para evitar la sequedad nasal.
Si sueles experimentar alergias estacionales, revisa con tu médico las opciones preventivas existentes.

Fortalece también tu mente

Como te decíamos, el cambio estacional puede influir en el estado de ánimo, produciendo ansiedad o apatía en algunas personas. Si estos síntomas son graves, te recomendamos consultar con un profesional de la psicología, pero también puedes:

Practicar meditación o técnicas de relajación y respiración profunda.
Planifica actividades que te gusten para mantener la motivación y una mentalidad positiva.
Socializa y disfruta del aire libre, el contacto con la naturaleza tiene muchísimos beneficios para la salud.

Acudir a consulta para un chequeo médico general también es una buena idea en esta época del año. Los cambios del cuerpo en primavera no son graves, pero pueden influir en nuestra energía y bienestar. Si experimentas síntomas persistentes de fatiga, alergias severas y otro tipo de malestar, es importante contar con la ayuda adecuada.