¿Qué se considera una persona con altas capacidades?

No es oro todo lo que reluce. Habitualmente, las consideradas personas con altas capacidades suelen experimentar importantes patologías relacionadas con el bienestar emocional y la salud mental. Parece que ser excepcionalmente inteligente muchas veces es un calvario que impide alcanzar la felicidad y la serenidad que deberíamos tener en la vida.
Pero, ¿qué es exactamente una persona con altas capacidades? Pues hoy nos gustaría poner el foco en algo tan, aparentemente, positivo y que no siempre lo es tanto. ¡Comenzamos!
¿Qué significa ser una persona con altas capacidades?
Una persona con altas capacidades intelectuales es aquella que demuestra un rendimiento significativamente superior al promedio en una o varias áreas cognitivas como el razonamiento lógico, la creatividad, la memoria o habilidades específicas en campos y disciplinas dispares como las matemáticas, la música o el arte.
Esta definición ha evolucionado con el tiempo, pasando de asociarse únicamente a un alto rendimiento académico o a un elevado coeficiente intelectual (CI), a incluir también aspectos como la creatividad y la capacidad de resolución de problemas. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se considera que una persona tiene altas capacidades cuando posee un CI igual o superior a 130, lo que representa aproximadamente el 2 % de la población.
¿Cómo se identifican las altas capacidades en una persona?
La identificación de las altas capacidades es un proceso complejo que requiere una evaluación multidimensional. No basta con medir el CI: es clave considerar otros factores como la creatividad, la motivación y las habilidades socioemocionales.
Las pruebas psicopedagógicas son herramientas clave en este proceso y se emplean muchas y de diferente naturaleza. Entre las más utilizadas se encuentran estas que mencionamos:
- Escalas de Wechsler para niños (WPPSI-IV y WISC-V), que evalúan diversas áreas del desarrollo cognitivo atendiendo a diversas variables.
- Tests de creatividad, como el Test de Pensamiento Creativo de Torrance (TTCT), que analizan la capacidad de generar ideas originales y resolver problemas de forma innovadora.
- Entrevistas y observaciones en diferentes contextos, como el hogar y la escuela, para obtener una visión integral del individuo.
La detección temprana de las altas capacidades es esencial para proporcionar una educación adecuada que estimule y desarrolle el potencial del individuo.
Sin embargo, muchas personas que, potencialmente, pueden ser de alta capacidad no llegan nunca a someterse a estas pruebas por los estereotipos y prejuicios del entorno en el que se encuentran.
Por ejemplo, es común pensar que una persona con altas capacidades siempre será capaz de salir adelante y tendrá un rendimiento académico excelente, lo que no es necesariamente cierto. Al contrario. Algunos estudiantes pueden aburrirse en clase debido a la falta de desafíos, lo que puede llevar a desmotivación, aislamiento social, falta de interés, depresión infantil… llegando incluso al fracaso escolar. ¿Qué suele ocurrir? Que lo que menos se piensa es que alguien así puede serlo por tener altas capacidades, de ahí que nunca se valore como explicación ni se realicen las pruebas pertinentes
Además, la falta de formación específica en el personal educativo y la sobrecarga de los orientadores escolares pueden dificultar una identificación y atención adecuadas.
Rasgos distintivos de una persona con altas capacidades
Existen ciertos indicadores que pueden hacer sospechar que eres una persona con altas capacidades, aunque esos indicadores pueden evolucionar con el tiempo.
- Entre ellos se encuentran una curiosidad insaciable, mostrando un interés profundo por diversos temas y formulando preguntas complejas desde temprana edad.
- Además, suelen aprender de manera rápida y eficiente, comprendiendo conceptos abstractos con facilidad.
- La creatividad es otro rasgo distintivo; estas personas tienden a generar ideas originales y a abordar los problemas desde perspectivas únicas.
- También es común que presenten una alta sensibilidad emocional, mostrando empatía profunda y preocupación por temas relacionados con la justicia y la moralidad.
Es importante destacar que estos indicadores pueden variar entre individuos y no todos presentarán las mismas características.
En el contexto educativo, es crucial que las instituciones estén preparadas para identificar y atender las necesidades de los estudiantes con altas capacidades. La falta de recursos y formación adecuada en las escuelas puede llevar a que estos estudiantes no reciban el apoyo necesario, afectando su desarrollo académico y emocional.
Programas de enriquecimiento curricular, adaptaciones metodológicas y, en algunos casos, la aceleración de curso, son estrategias que pueden implementarse para satisfacer sus necesidades educativas. La colaboración entre padres, educadores y profesionales especializados es fundamental para crear un entorno que fomente el desarrollo pleno de las potencialidades de estos individuos.